El Gobierno Vasco ha anunciado la creación del Sello de Accesibilidad en la Vivienda, una herramienta pionera que comenzará a aplicarse en 2025 y que permitirá evaluar y certificar el grado de accesibilidad de los edificios residenciales en Euskadi. Esta medida forma parte de la estrategia autonómica para avanzar hacia una vivienda más inclusiva, sostenible y adaptada a todas las personas, independientemente de su edad o capacidad.
En Arquinea, estudio de arquitectura en Bilbao, valoramos esta iniciativa como un paso decisivo hacia la universalización de la accesibilidad, tanto en la vivienda nueva como en la rehabilitación del parque edificado existente.
UNA MEDIDA CLAVE DENTRO DE LA ESTRATEGIA BULTZATU 2050
El anuncio, realizado por el consejero de Vivienda y Agenda Urbana, Denis Itxaso, durante la jornada “Euskadi: un compromiso compartido” celebrada en el Kursaal de Donostia, forma parte de la estrategia Bultzatu 2050, centrada en la regeneración urbana y la rehabilitación de viviendas en 25 barrios vulnerables de 20 municipios vascos.
La accesibilidad se considera uno de los pilares fundamentales de esta estrategia, ya que eliminar barreras arquitectónicas no solo mejora la calidad de vida, sino que también garantiza el ejercicio de otros derechos básicos como la autonomía personal o la participación social.
QUÉ ES EL SELLO DE ACCESIBILIDAD EN LA VIVIENDA
El nuevo sello se concibe como una herramienta técnica de evaluación y certificación, capaz de medir el nivel de accesibilidad de cada edificio y vivienda mediante un sistema de indicadores objetivos.
Estos indicadores se agrupan en tres grandes ámbitos de análisis:
- El entorno urbano: accesos desde la vía pública, conexión con transportes, pendientes, itinerarios peatonales y zonas comunes exteriores.
- Los espacios de comunicación interior del edificio: portales, escaleras, ascensores, pasillos y demás elementos compartidos que condicionan la movilidad vertical y horizontal.
- El interior de la vivienda: dimensiones de estancias, anchura de puertas, radios de giro, baños adaptables, señalización o elementos de apoyo.
Con ello se pretende hacer visible el nivel real de accesibilidad de las viviendas en Euskadi, y convertir este sello en un indicador medible y comparable a escala autonómica.
UTILIDAD Y BENEFICIOS DEL NUEVO SELLO
El Sello de Accesibilidad aportará información clara, verificable y útil para distintos agentes:
- Propietarios y compradores, que podrán conocer el grado de accesibilidad de una vivienda antes de alquilarla o adquirirla.
- Profesionales y técnicos, que contarán con una herramienta homogénea para planificar mejoras, evaluar el cumplimiento normativo y orientar reformas.
- Administraciones públicas, que dispondrán de un sistema objetivo para priorizar ayudas, establecer requisitos mínimos en obras subvencionadas o incorporar los datos en las Inspecciones Técnicas de Edificios (ITE).
- La sociedad en general, que tendrá acceso a un diagnóstico global sobre el estado de accesibilidad de los entornos urbanos y residenciales.
INNOVACIÓN Y AYUDAS COMPLEMENTARIAS
El Departamento de Vivienda también ha anunciado la creación de una nueva línea de ayudas para fomentar la innovación en accesibilidad, dentro del programa Eraikal.
A partir de los presupuestos de 2025, se impulsará una línea de financiación plurianual de hasta 75.000 euros por proyecto para apoyar iniciativas de investigación y desarrollo (I+D+i) orientadas a eliminar barreras arquitectónicas y mejorar la calidad de vida en los entornos habitables.
Esta línea de apoyo se suma al nuevo sello como parte de una política integral de accesibilidad, que busca combinar la evaluación técnica con la promoción de soluciones innovadoras y replicables.
UNA HERRAMIENTA ALINEADA CON LA ESTRATEGIA DE ACCESIBILIDAD EN EUSKADI
El despliegue del Sello de Accesibilidad está alineado con la Estrategia de Accesibilidad en Euskadi, que persigue disponer de información real, uniforme y comparable sobre el estado de los edificios y su entorno más próximo.
El objetivo es facilitar la gestión pública y privada de la accesibilidad, promover la transparencia y establecer estándares comunes de diseño universal que puedan extenderse, en el futuro, a otros ámbitos o servicios.
Como ha subrayado el consejero Itxaso, “la accesibilidad no es un lujo ni una opción, sino una necesidad urgente y un compromiso colectivo que debemos mantener activo día a día”.
En conclusión, la llegada del Sello de Accesibilidad en la Vivienda en 2025 supondrá un avance decisivo hacia una Euskadi más inclusiva y habitable. La certificación del grado de accesibilidad permitirá planificar mejor las rehabilitaciones, incentivar la innovación y ofrecer más transparencia al mercado inmobiliario.
En Arquinea creemos que este tipo de iniciativas son esenciales para construir un futuro donde todas las personas puedan habitar y disfrutar de los espacios sin barreras.
Si quieres adaptar tu edificio o vivienda a los nuevos estándares de accesibilidad, contacta con nosotros: te ayudaremos a planificar las mejoras necesarias y a preparar tu inmueble para la certificación del nuevo sello.
